En Una Boda Deseada, siempre nos gusta acercaros las nuevas tendencias en bodas que vamos detectando, ya que nos encanta que descubráis a través del blog ideas innovadoras, que podáis incorporar a vuestros eventos.
Mientras que en 2021 lo importante era poder casarse (dadas las circunstancias por el Covid), poco a poco, debido a la normalización de la pandemia, han surgido nuevas modas e ideas, que evidencian hacia donde van evolucionando las bodas: a recuperar lo que fueron antes de la pandemia: un gran espectáculo.
Por eso surgen nuevas modalidades de festejar, como es la tendencia de la que venimos a hablaros hoy, y que reconocemos que ¡nos encanta!: las torres altas de copas para servir el champán.
Una moda asociada a los grandes enlaces del siglo pasado, que también nos recuerda a las glamorosas fiestas de los felices años 20 en Estados Unidos, y que triunfará en las bodas de 2022, en las que se recupera el gusto por el exceso y la espectacularidad. Algo que llega pisando fuerte después de dos años de prudencia y miedo.
Hoy os contamos más sobre esta modalidad en las bodas:
- Preguntad a vuestra finca o catering si os ofertan este servicio. Si no es así, podréis contratarlo por fuera o encargarlo vosotros mismo, aunque os recomendamos que el montaje le hagan profesionales, ya que, aunque la colocación de las copas en formato pirámide, pueda parecer sencilla y que la puede hacer cualquiera, lo cierto es que depende de muchos factores (colocación exacta, inclinación del suelo, del soporte, tipos de copas, estructura…) que hay que tener en cuenta para evitar que algo bonito y espectacular se convierta en la anécdota de una jornada en la que los protagonistas tenéis que ser vosotros, y no la caída de unas copas.
- Podéis elegir cuándo hacer este brindis entre muchos momentos de la boda: bien en vuestra llegada al cóctel, en la entrada al almuerzo o cena o después de que esta finalice. ¡No hay reglas exactas! Podréis adaptaros y hacerlo en el momento que más os guste.
- También tendréis que elegir el formato de las copas, las más empleadas son las conocidas como modelo Pompadour (ya que, al ser más bajitas y anchas, son más estables), que deben su nombre (y forma) a la leyenda que cuenta que fueron diseñadas a imagen y semejanza de los senos de la amante de Luis XVI, Madame Pompadour. La altura de vuestra torre determinará cuáles son las más apropiadas para evitar incidentes.
- No hay que tener en la torre una copa por invitado, sino que este momento es más “espectáculo” que realidad. Luego los camareros podrán servir a cada invitado en mesa su copa. Por lo que no penséis que, si tenéis 200 invitados, la torre debe tener 200 copas. Es un “falseo” para hacer el guiño a tus invitados y tener como recuerdo una foto bonita, especial y diferente.
- En cuanto a la bebida, podéis servir en las copas champán, pero también cava o vino rosado, como más os guste.
- Si no os atrevéis a hacerlo vosotros, podéis encomendar esta tarea a otra persona, bien el maître de vuestro catering, bien un familiar o amigo que quiera hacerlo, aunque desde aquí, somos partidarios de que si se hace, lo hagan los novios, como protagonistas de su enlace y también de este momento.
- Nos parece una forma original de celebrar y, sobre todo, de dedicar un brindis a vuestros invitados. ¡Seguro que este momento no le olvidarán! Aprovechad también para dedicaros unas palabras entre vosotros, como novios, sobre todo, si en la ceremonia no habéis tenido votos y os apetece deciros algo públicamente. Puede ser buen momento.
- Si no quieres renunciar a tener una torre de copas de cristal en vuestra boda, pero no “os atrevéis” a echar en ellas el champán, también podéis recurrir a ellas simplemente como elemento decorativo en el salón o en la barra del Candy Bar, por ejemplo.
Tanto si os gusta como si no, tanto si lo hacéis como no, desde este post deseamos lo más importante: ¡Que no nos falten nunca los motivos por los que brindar!
Y a vosotros, ¿os gusta esta tendencia?