Hoy en #YaSeHanCasado recordamos la boda de Candela y Pablo, celebrada el pasado 31 de octubre en Marbella, tras dos años de relación.
La ceremonia tuvo lugar en la Iglesia Nuestra Señora de la Encarnación. Posteriormente los 52 asistentes se traladaron a comer al Restaurante El Lago, y los más jóvenes fueron de copas a Trocadero Zanzibar (el kiosko que hay en Trocadero Arena).
¡Gracias por haber compartido con nosotros vuestra historia, vuestras ganas de casaros y los consejos para los novios de 2021!
¿Cómo recuerdas tu boda?
Entré nerviosísima, del brazo de mi padre, disfrutando cada momento. Después del rito del matrimonio, me relajé y disfruté la misa al 100%. Cada momento fue especial, desde los preparativos, pasando por la Iglesia, la comida, el baile, hasta el momento de quitarme los tacones con una sonrisa increíble.
¿Cambiarías alguna cosa o lo harías todo tal cual?
No cambiaría absolutamente nada de ese día.
¿Qué fue lo más tedioso del proceso de preparación y organización?
Lo peor fue que las medidas cambiaban constantemente. Esa misma semana cambiaron dos veces y nos afectaba en cuanto a número de invitados, en las mesas, en interiores… Fue horrible, porque así es imposible organizar.
¿Y lo que menos?
Con ilusión al final todo se hace con gusto. No hay que olvidar que ese día es nuestro, y que lo hacemos porque queremos, así que había que dejar los nervios de lado, adaptarse al tiempo que nos ha tocado vivir, y decidir con una sonrisa cada cosa de la boda.
El sueño de toda novia es su vestido. Háblanos del tuyo.
El vestido era con el que mi madre se casó, tiene 35 años, pero creo que se sigue viendo actual a pesar de su toque vintage. Lo escogí porque como he dicho antes, mi idea era casarme el mismo día que mis padres, pero como no fue posible, quise al menos llevar su vestido. Simplemente le cambiamos la falda, que antes tenía cancán, y la quise ajustar, pero no hubo que hacerle más modificaciones. También usé el velo de mi hermana.
Habéis sido una de las parejas valientes, que ha decidido seguir adelante con el enlace a pesar de la situación. ¿Cómo habéis vivido el proceso? ¿Os costó mucho tomar la decisión?
Nuestra fecha inicial era el 4 de septiembre de 2020, pero antes de verano decidimos retrasarla al 8 de mayo de 2021. Nos alegramos de no habernos casado el 4 de septiembre porque hubiésemos mantenido la idea inicial y nos habría fallado muchísima gente por los miedos, como es normal, además mi hermana estaba embarazada de 9 meses y no lo habría disfrutado igual. Pero a mitad de septiembre decidimos que no queríamos esperar más, y fuimos a la Iglesia a elegir fecha. Nos dieron el 31 de octubre y no lo dudamos.
Cuéntanos alguna anécdota de vuestro gran día:
Hablé por facetime con mi abuela y mis amigas de Madrid, no se me olvidarán sus caras al verme. El día estuvo lleno de anécdotas increíbles, enumerarlas todas es imposible.
¿Qué les dirías a todas aquellos novios que han optado por aplazar su boda?
Mi recomendación es NO aplazarla si las condiciones lo permiten. Es cierto que hay gente que no podrá ir por las restricciones, pero hay que pensar en lo importante: si te quieres casar te puedes casar, otra cosa es la fiesta, pero yo no quiero posponer mi vida por una fiesta. Al final puedes estar con todos los invitados que acuden y dedicarles su ratito.
¿Habéis hecho viaje de novios?
No viaje como tal, pero una semana después de casarnos nos fuimos en moto por la zona: fuimos a Gibraltar y por la sierra de Málaga y Cádiz. Finalmente dormimos en el Parador de Ronda y al día siguiente volvimos corriendo a Marbella, que cerraban los municipios.
También han compartido con nosotros los proveedores de su gran día por si os sirven para tomar alguna idea. ¡Gracias por participar chicos! Os deseamos felicidad eterna.
- Vestido: El vestido de mi madre de novia
- Zapatos: Bimani
- Pendientes: Me los prestó mi madre
- Alianzas: Joyería de Valladolid
- Traje novio: Scalpers
- Catering: Restaurante El Lago
- Fotografía: Mónica Ortega
- Vídeo: Adrián Santana