2025 será un año en el que imperará el minimalismo en muchos elementos relacionados con los vestidos de novia, accesorios y complementos. No tanto asi en las bodas en general, donde cada vez asistimos en mayor medida a celebrar grandes enlaces, con multitud de detalles y experiencias para nuestros invitados.
Por su parte, el total look de novia tiende cada vez más hacia la sencillez, frescura y naturalidad. ¿El motivo? Nos gusta sentirnos nosotras mismas y no recurrir a grandes artificios ni elementos ese día, con los que sentirnos disfrazadas.
Uno de los elementos en los que veremos este minimalismo será, sin duda, en los ramos de novia.
Atrás quedaron ramos recargados, copuestos con multitud de flores de temporada de distinto tipo. Atrás dejamos las grandes inversiones en flores con este elemento.
Damos ahora la bienvenida a diseños pequeños, discretos, sencillos, casi en miniatura, en muchos casos incluso, formados con una sola variedad de flor. Decimos hola a los ramos bonitos, pero en formato reducido.
Las novias todavía no se atreven a dejar de lado el ramo y suprimirle en su gran día, ya que sigue imperando la tradición de llevarlo bien por estética o superstición, pero si que es cierto que cada vez vemos novias más atrevidas que no apuestan por ramos tradicionales y de un tamaño normal, sino que optan por diseños más reducidos, con los que además ganan en comodidad.
Además de abaratarse costes con el ramo, las novias tendrán asi mas facilidades a la hora de realizar réplicas del mismo, que poder regalar y entregar ese día a sus seres queridos.
Las novias siguen apostando por flores frescas, aunque en 2025 veremos como muchas ya eligen flores preservadas para este elemento, ya que duran en el tiempo y pueden conservarse mejor para el recuerdo.
Los mini ramos de paniculata solamente serán los preferidos de las novias de 2025, por su sencillez, elegancia y versatilidad. Les veremos en multitud de ocaciones, tanto en bodas de verano como en invierno.
¿Qué os parece¿ ¿Os apuntáis a la idea de los ramos de novia “minis”? Os leemos.