Paula e Iñigo son y viven en Madrid. Se conocieron desde que son niños, del colegio.
Tras 11 años de relación, por fin, pudieron darse el “sí, quiero” el pasado 1 de julio.
Lo hicieron ante 175 invitados, con una ceremonia en la Iglesia de los Jerónimos de Madrid, y después se trasladaron a la Finca el Soto de Mónico para la celebración.
Hoy son los protagonistas del post de hoy. Muchas gracias, chicos, por participar y compartir con nosotros vuestra #BodaDeseada.
¿Cómo conociste el blog?
Por Instagram, ¡me encanta! Está super completo y los vídeos están fenomenal, ojalá haberlo descubierto antes.
¿Cómo recuerdas el día de la boda? ¿Fue como lo habíais imaginado? ¿Superó vuestras expectativas?
Me parece mentira que haya pasado ya, lo recuerdo como una película, como si lo viera desde fuera. Superó totalmente las expectativas porque, por mucho que lo habíamos imaginado un millón de veces y es cierto que teníamos todo organizado al detalle y con poco margen a la improvisación, las emociones de ese día son incomparables. Puedes visualizar cada momento desde meses antes, pero las sensaciones que tienes en esos momentos son imposibles de describir y de adelantar.
¿Cambiarías alguna cosa de vuestra boda o lo harías todo tal cual?
No cambiaría nada de la boda, la verdad. Hubo pequeños detalles que quizás, sabiéndolo, habría hecho de otra manera, pero son todo cosas poco importantes. Lo que, si intentaría, aunque sé que es imposible, es disfrutar más cada momento, pero ese día estas en una nube y por mucho que te hayan dicho mil veces que saborees todo, se pasa volando.
¿Qué fue lo más tedioso del proceso de preparación y organización? ¿Y lo que menos?
Yo, al trabajar en el sector de la moda y novias, tenía bastante claro cuáles eran los pasos a seguir, y en ningún momento me agobió no saber por donde tirar. Lo que me pareció más frustrante fue, sin duda, la parte burocrática, el tener que pedir papeles en 5 iglesias distintas, ir al registro, que te daban cita con meses de antelación… eso me agobió un poco y me pareció lo peor de la planificación. Lo demás (flores, papelería, mesas, vajilla, luces, mi look…), aunque a veces puede sobrepasarte, es mucho más creativo, así que en realidad es decidir cosas bonitas, me gustó mucho ese proceso y poder vivirlo con mi futuro marido y nuestras familias.
El sueño de toda novia es su vestido. Háblanos del tuyo
Yo en mi día a día soy bastante básica vistiendo, pero es verdad que con los looks de invitada me gusta darlo todo, así que quería algo que reflejara esa dualidad. A Cristina de Valenzuela Atelier se le ocurrió hacer una base muy limpia con apenas costuras a la vista, un diseño de escote en ‘V’, espalda abierta y corte semiimperio en crepe y aportar el toque especial mediante unas espectaculares mangas abullonadas creadas a base de flores de organza y pequeñas piedrecitas. También tenía claro que quería una gran cola y velo clásico de tul, porque la escalera de los Jerónimos lo pedía a gritos y me apetecía tener ese momento ‘princesa’. Al final, decidimos hacer el velo más especial aún añadiendo las mismas flores de la manga en el bajo, creando un efecto degradado que quedo increíble.
¿Qué anécdota recuerdas de vuestro gran día?
Había practicado llevando el velo por el atelier y por casa, pero cuando llegué a la iglesia me encontré con que se quedaba enganchado con la alfombra, lo pasé un poco regular en el camino al altar porque me iba tirando un montón de la coleta y pensaba que se me iba a desmontar todo el peinado. Me agobié un poco, pero fueron solo unos segundos y, en realidad, iba tan emocionada que (casi) ni sentí el dolor.
Cuéntanos cómo viviste estos momentos de la boda:
Tus preparativos
Recuerdo despertarme en casa de mis padres pensando ‘¿en serio ha llegado ya el día después de tantos años?’. Fue muy especial estar con ellos y mi hermano y vivir esos momentos previos tan emotivos juntos, creo que me tiré el día entero llorando.
Tu llegada a la ceremonia y encuentro con tu pareja
A la llegada estaba nerviosísima, menos mal que iba con mi padre que es capaz de transmitirme su tranquilidad y me calmó un poco. La verdad que entrar en la iglesia y ver a todo el mundo impone, aunque fue más emotivo que otra cosa, era un momento que me daba mucho miedo pero al final lo disfruté más de lo que pensaba. El encuentro con Iñigo fue muy especial, yo no paraba de llorar y estaba temblando, y el verle a él tan emocionado me hizo emocionarme pero a la vez estar a su lado me tranquilizó.
La salida de la ceremonia como marido y mujer
Lo recuerdo como felicidad absoluta, es un momento en el que ya se han ido los nervios y al salir ves a toda tu gente súper feliz por ti, todos sonríen, te gritan, te hacen fotos y están deseando celebrar contigo.
¿Qué detalles tuvisteis con vuestros invitados?
Dimos una pulsera solidaria para recaudar fondos contra el cáncer de mama, una causa que me toca de cerca ya que mi madre sufrió la enfermedad. Aparte, a los amigos cercanos les dejamos en el plato una polaroid con cada uno de ellos que iba dedicada por detrás, y a los futuros novios les dimos un ramo con una notita.
Momento ramo de la novia
Hicimos varios ‘momentos’ especiales, me gustan las bodas animadas y entretenidas en las que pasan cosas y se hace partícipe a los invitados. Después del entrante, le di una réplica de mi ramo a mi madre, otro ramo diferente a mi suegra y un álbum con las fotos de la pedida a nuestros padres a ritmo de Dancing Queen, de Abba.
Tras el primer plato, dimos a cada uno de los abuelos de Iñigo una foto enmarcada y sonaba Con te partiró de Andrea Bocelli.
Entre los postres y el café quisimos empezar con el ánimo de fiesta y pusimos Hey Brother, de Avicci, para darles marcos de fotos a nuestros hermanos mientras bailábamos y saltábamos con ellos.
Baile nupcial
Queríamos hacer algo que nos definiera: clásico pero con un toque diferente. Por eso, abrí el baile con mi padre bailando Your Song de Elton John, lo que fue un momento muy especial entre nosotros, y posteriormente entró Iñigo y, después de unos segundos bailando lento, sorprendimos con una bachata bastante elegante que a la gente le encantó. La coreografía nos la hizo Diego Navarro, del CBD Team Fenix, y fue un éxito.
¿Habéis hecho viaje de novios? ¿Dónde, cómo ha sido?
Hemos estado en Kenia, Tanzania y Maldivas y ha sido un auténtico sueño. Desde hacía años teníamos ganas de hacer un safari y lo hemos hecho por todo lo alto, con 10 días entre dos países increíbles en los que hemos podido descubrir su cultura y ver muchísimos animales de cerca. Eso sí, es una paliza, así que queríamos acabar con unos días de descanso paradisiaco, y nada mejor que las Maldivas para ello.
También nos comparten los proveedores en los que confiaron para su gran día, por si queréis tomar nota:
- Vestido: Valenzuela
- Zapatos: Flordeasoka
- Peinado: Paula Guzmán
- Maquillaje: Paula Guzmán
- Peinetas: Valenzuela
- Pendientes: Aristocrazy
- Alianzas: Suárez
- Traje novio: Bon Vivant
- Finca: El Soto de Mónico
- Catering: Mónico
- Flores: Marta Azpeitia
- Iluminación: Luces de Cuento
- Fotografía y vídeo: Click 10
Os deseamos felicidad eterna en esta nueva etapa como marido y mujer.